Thursday, April 30, 2009

Siempre sigo viva

Mi canción favorita desde tiempos remotos es "I Will Survive." Cuando una es hedonista y sabe que va a entregar cada pedacito de sí misma, sólo le queda por consuelo tener la certeza de que se va a sobrevivir siempre pase lo que pase. Y pienso en mi como una cucaracha emocional capaz de sobrevivir a cualquier bombardeo atómico al que decida someterme. Que prefieres no casarte porque tienes planes de grandeza, ir a Argentina y explorar el mundo... POW!!! Sobrevivo! Que te da pena que vean que soy artista y de las raras que se sienten feministas... POW!! PLUM!!! Sobrevivo! Que prefieres llevar a NY a tu nueva amante porque es más emocionante Y TETONA que yo! PUAJ! PLUM! POW!! CUAS!!!! Sobrevivo.
Que me gustas, pero no tanto para hacer enojar a mi madre... Que me encantaría que te quedaras y llevarte a conocer el mediterráneo en bote, en unos años cuando pueda comprar el bote... Que necesito que le masajees las patas a mi madre, porque si me quieres la quieres... Que mi tren todavía no para en esta estación... Que sigue sin parar y sigue sin parar y sigue sin parar... Que si mis gallinas no pueden andar con cualquier gallo... Que si te quiero un chingo pero no voy a atravesar el trópico de cáncer para verte porque tengo tos... Que si no voy a pelear con mi madre, mi abuela y mis tías por tí... Que si te quiero un chingo, pero ella me da penita y no la voy a hacer sufrir (este argumento extrañamente se repite en mi vida)... Que si al final de cuentas hay quincemil cosas más importantes en el Universo que una mujer... Que sí te amo pero...
POW!! WOW!! ZAZ!!! PUM!!!! SPLAT!!!
Bujuju y todo resuelto...
Tres lagrimones, un pare de lloraderas en la regadera. Echarle la culpa al pendejo que nunca se dejó besar en prepa y me ocasionó traumas de por vida. Echarle la culpa a un posible embarazo no confirmado y jamás sabido... Echarle la culpa a la viudedad de mi alma. Y siempre, siempre, siempre sobrevivo.
Llega un momento en que me fastdia la consciencia de esa supervivencia. ¿De verdad no habrá nada que me haga no sobrevivir? ¿Es necesario tanto dolor? Sí, sí lo es, porque sólo así puedo vivir el placer con tanta magnitud. Una montaña rusa.
Y bueno, hoy voy a sobrevivir. Y estoy emputada de saberlo. Encabronada de darme cuenta que aunque decida o no llorar como quiera va a pasr el tiempo y voy a sobrevivir. Hoy he decidio dejarme llevar sin tomar actitudes maduras. No quiero ser madura. Quiero hacer un berrinche. Quiero llorar y estallar y arañar las paredes del coraje. Pero tampoco lo voy a hacer porque mis uñas no tienen la culpa de nada, y la verdad tampoco me late arruinar la pintura.
Y poco a poco me calmo, salgo de mi estrás, me doy cuenta de que el mundo sigue girando y sólo soy yo la que se conmociona. Paren el mundo me quiero bajar, es un frase que describe lo más profundo de mi alma. De pronto quiero sentir como sienten los demás, vivir como viven los demás, pensar como piensan los demás, y dejar de una vez por todas de ser tan "única y especial," tan "intensa."
Mi reacción es exagerada, como siempre! Por eso tengo capacidad de sobrevivir a mí misma y mis reacciones. Tengo unas ganas de terminar con esta aventurita inecesaria. Sí, hay mucha emoción, muchas cosas divertidas. Pero es tan inecesaria. Es cosa tan superflua, tan vanal en momentos de crisis. Dicen que en los momentos difíciles ves a tus verdaderos amigos, y yo agregaría que encuentras a tus verdaderos amores.
En fin, que por cinco días de puente nadie ha muerto. Que a mí no tiene por qué dolerme que mi... mi nada, porque a final de cuentas no somos nada, se vaya cinco días al carajo o a donde le quede más cómodo. Que yo no tengo por qué sentir ningún tipo de frsutración en absoluto y soy una mujer lo sificientemente grandecita como para retomar su vida tan tranquilamente como cualquier día.
Así pues, que ya estuvo bueno del show de extrañar a dos o tres o cuatro, y mejor en vez de extrañar me pongo a hacer mis cosas que buena falata me hace dedicarme tiempo a mí. Tomaré los tips de un blog perdido que encontré por allí y pasaré unos días de lujo, con dos coletas, sin maquillaje y sin tener que depilarme. Voy a bordar y bordar y bordar hasta que me duelan los dedos y sobre todo voy a actuar como lo que se me ha olvidado en unmes: como una madre Santa, pura y casta, que buena falta me hace ya.
Y me voy a dejar los dramas de lado y me voy a concentrar en aprovechar para desintoxicarme de esta aventurita inecesaria. Sirve que puedo fantasear con la idea de que a su regerso, ya no tendré más ganas de verle. Ya decía yo que tenía razón, no debía gustarme tanto.
Sobreviviré. Claro que sí!

Tuesday, April 28, 2009

Números

Han pasado dos meses y seis días desde la primera propuesta de "volver a tomar fotos." No me he dejado sacar ninguna. Han pasado 26 días desde la primera vez que cogimos. Nos hemos visto 20 de 26 días. Hemos tenido, al menos, 9 encuentros íntimos. Viernes 3, sábado 4, miércoles 8, jueves 9, sábado 11, miércoles 15, sábado 18, jueves 23 y martes 28. Del mes 4. Hemos cogido por lo menos 19 veces y provocado en mí al menos 30 orgasmos. Con un ataque de risa y casi uno de llanto. Dos nalgadas. Varios No's olvidados. Alrededor de 9 condones puestos con la boca.

Nos hemos desvelado juntos en messenger al menos 3 veces a la semana. Han corrido cientos de mensajes de texto. Le he pedido un abrazo. Me he regresado dos veces a dar un beso. He inventado 15 excusas para verlo. He inventado una para no verlo. Me ha dejado tres veces en el trabajo. Me ha recogido dos veces después del trabajo. Me ha llevado un objeto olvidado al trabajo. He perdido dos ligas, un arete, una tapa de un tupper y una calceta de bebé.

Hemos tenido 5 encuentros "furtivos". Hemos estado en 4 cuartos de hotel. Nos hemos bañado juntos al menos 7 veces; 4 regaderas; un jacuzzi. Hemos dormido 5 noches y amanecido uno junto al otro 5 mañanas. Hemos tenido un mañanero. Lo hemos hecho 3 veces en la madrugada.
Me ha regalado dos Milky Way. Un blizzard de pay de queso con fresas. Varios Mc Tríos. Incontables visitas al Carl's. Una cena romántica para tres. Dos idas al cine. Un room service: dos Maruchan.

He escrito 14 entradas. He publicado 12. He llorado tres veces. Me he enojado otras tres. He escondido muchos "te quieros" dentro de un "me encantas". Le he dicho 6 veces "te quiero." Me ha dicho dos veces "te amo."

Y hay muchas, muchas cosas más que no recuerdo...

Pero, ¿quién lleva la cuenta?

Lo que leo...

Hay cosas que leo y me dejan muy movida. Esta es la carata de un viudo, a otro amigo suyo, también viudo. En ella le explica cómo volverse a enamorara no significa dejar de amar a quién se amó primero. Me conmovió muchísimo, porque creo que lo mismo aplica cuando el primer, segundo o tercer amor sigue vivo. Es intensa, tal cual me gustan las cosas.
lunes 20 de abril de 2009

Intimo y personal
Entre tú y yo. Si eres listo, que lo eres, sabrás que eres el destinatario de esta carta. Solo entre tú y yo, nadie más. Acércate, lee con cuidado.Los que olemos estas situaciones de cerca, sabemos qué está sucediendo, que te está pasando y lo que pasa por tu cabeza. Puedes estar tranquilo, nadie más se está dando cuenta y nadie sabrá qué pasa hasta que vosotros queráis hablar. Forma parte de vosotros, de vuestra vida privada, de esa intimidad que siempre quisiste cuidar y tan bien lo has hecho siempre. Pero lo que yo me huelo y sé que hay, es el principio de una nueva ilusión. Y de miedos, como los niños pequeños, cuando se despiertan sobresaltados, llorando, asustados. Y así te sientes ahora, déjate de comerte la cabecita. Porque miles de preguntas y sensaciones pasarán por dentro de ti. Déjame que te ayude: lo que tienes, ni más ni menos es miedo e ilusión.Tienes miedo porque no sabes lo que hay más allá, lo que te espera, lo que vivirás, lo nuevo, lo viejo, el pasado que se mezcla con el presente.Y tienes ilusión por ella, por ti, porque vuelves a sentir, cuando pensaste que jamás lo harías.Tienes miedo porque te despiertas sonriendo un día, y te preguntas la razón de esa sonrisa hasta que a tu mente viene ella y esa ilusión se convierte en Pánico. Así, en mayúsculas.Y tienes ilusión porque aunque te niegues a sentir, a aceptar que quizás vuelvas a enamorarte en el fondo ya está sucediendo y lo sabes. Aunque no lo quieras creer, sabes lo que está sucediendo dentro de ti y que es imparable.Y una lucha interna batallará sin descando en tu interior: quieres estar a su lado pero... no puedes. Quizás porque no sientas ese derecho, porque temas, porque sientas que se te va de las manos... es que, siento decírtelo pero, ya se te está yendo de las manos :).Te voy a dar una buena noticia y una mala.La mala: que tardarás mucho MUCHO tiempo en dejar de ser bipolar entre el miedo y la ilusión.La buena: que la ilusión matará al miedo. Además sin compasión.Y te sentirás culpable cuando caiga ese primer beso. Es más, posiblemente, si cierras los ojos, tu mente, cabrona y zorra como todas las mentes, dibujará la imagen del primer amor. Pero ¿Sabes qué? Cuando los abras y descubras ese nuevo rostro, no solo no te sentirás decepcionado, si no que esa sonrisa se hará más grande, más abierta. Y te sentirás más feliz.Tu mente cabrona te jugará malas pasadas, que se transformarán en palabras idiotas, en confusión de nombres y un día nombrarás, en el peor de los momentos, a esa otra persona que tanto amaste y que tanto echas de menos. Porque no es pecado añorar a quien amaste. Y cuando la nombres, en el peor momento, la peor situación, en esa ocasión te querrás morir del disgusto, salir corriendo, desaparecer, gritar "tierra trágame".Pero tu pareja, que te ama, que lo sé que YA te ama, porque tu historia y la mía no son tan distintas y caminan de la mano, pedirá a la tierra que no te trague que te quiere, que son cosas que pasan. Y reirá y te obligará a sonreir. Sabe y conoce tu pasado y si le hablas y le cuentas tus temores, todo será mucho más fácil.¿Te cuento un secreto? Ari ya no discute cuando le digo "Axel, pásame el arroz". Solo me tira el paquete a la cabeza, simula enfado, con una sonrisa y terminamos con un abrazo y un beso. Somos afortunados en algo: ni ella es celosa ni mi niño lo es. Y eso dará mil puntos a la relación. Aportarán más ellos de lo que podamos hacer nosotros.Un día te sorprenderás al escuchar de tu propia boca un "Te quiero". Y te reirás muchísimo cuando subas al nivel de "Te amo". Más bien os reireis los dos. Tú sorprendido de haber sido capaz de soltar algo así y ella de escucharlo. Pero siempre recordarás ese "Te quiero". Y aunque no te lo creas lo recordarás con más intensidad y claridad que el primero de tu vida. No sé las razones pero es así. Pero quiero que sepas algo, la vida es cruel y agradable. A veces, de un zarpazo te lo quita todo, te quieres morir y piensas que lo más fácil es terminar con todo, de un golpe cerrar los ojos y dejarte caer. Y que la vida siga su curso sin uno mismo. Apearse del tren.Si eres valiente y no abandonas, descubrirás que aquello que parecía imposible se puede cumplir. Seguro que todas las veces que te dijeron "siendo joven reharás tu vida" odiaste al autor de la frase. Normal, a los viudos deberían darles un cartel para llevar en la frente "no me jodas, sé que soy joven pero no me hables de sustituir a mi amor". Lo que dicen por hacer un bien para nosotros es una mierda ¿verdad? No lloramos porque nos quedamos solos y a dos velas. Lloramos por su ausencia.Pues ya ves que al final se cumple. Y ¿a qué sientes vergüenza? ¿y te sientes que no tienes derecho a hacerlo? Mala suerte, tú que eres creyente, pregúntele a tu jefe por qué nos ha hecho tan imperfectos ;) . Cuando pase esa época te dará hasta risa recordar cuando se te ponían las mejillas coloradas al pensar en ella.Y se te seguirán poniendo coloraditas durante mucho tiempo. Es lo malo de estar enamorado, que haces muchas tonterías y aquellas que hacías antes... ¡las repites de nuevo! Y te pones colorado, tartamudeas, dices tontería tras tontería... Después sí, se te va la fase idiotizada aunque sigas enamorado.Te dirán que es imposible amar a dos personas ¡mentira cochina! Hay quien es capaz, quien es incapaz, quien lo ve imposible... también hay quien ve imposible que dos hombres se amen y míranos al morenazo y a mí. Son amores distintos, vale, pero se puede hacer. No se trata de un repuesto.Que nadie te lo diga, no permitas a NADIE que te hable de repuestos. No se trata de eso, se trata de seguir adelante, primero arrastrándose, después levantando la cabecita, por último continuando la vida donde la habías dejado, con otras metas, otras ilusiones. Pero adelante, siempre.Llora siempre que lo necesites. No tiene nada de malo y sé que ella estará a tu lado. Llora y enfádate. Que llores por quien no está no quita que no quieras a quien sí está. Si la echas de menos... ¿Cómo no vas a hacerlo después de tanto tiempo? No permitas que te vengan con el cuento de la alianza. ¿Sabes que me decían a mí? "Quítate la alianza ¿Ari no te dice nada?"Un día le pregunté a Ariel que qué hacía con la alianza, si a él le molestaba. Me dijo que no, que era feliz conmigo y que si yo lo era con él y con la alianza, que no pasaba nada. "Al fin y al cabo es un aro de oro".Dos alianzas pueden convivir juntas. Una en una mano y la otra en la otra. O en la cadena, junto a la virgen de caravaca, o ... donde quieras. Un aro de oro con mucho significado, cada uno tiene una historia. Y una no vale más que la otra. Que también te cansarás de escuchar muchas gilipolleces de ese tipo. No vale más que la otra, solo son distintas, con dos historias y muchos momentos en su interior.¿Sabes qué? No temas a esos primeros momentos. No te avergüences cuando cojas su mano o le acaricies. Hazlo siempre cuando creas que ha llegado el momento, sabrá esperar. No te preocupes. Pero no fuerces la máquina. Todo a su tiempo. Y atiende sus dudas. También las tendrá y sus momentos de miedo. Si eso la derivas a Ari, que tiene un máster :P. Ahora en serio, hagas lo que hagas, hazlo porque sientes que ha llegado el momento, sea cual SEA. Poquito a poco, con calma, con risas, con mucho diálogo. Que ella te ayude a ti y tú le ayudes a ella.Hablad siempre.Sonrío pensando en lo que estás viviendo ahora mismo. Y en ese huracán que guardarás dentro y del que no sabes como salir. Pero tranquilo, ya te digo que pasará. Eso sí, ten paciencia, la cosa va para largo. Y en el primer beso, un 40% se irá a tomar por saco. Después irá todo más lentamente, y más intenso, y daréis paso a otros caminos.Pero eso, poco a poco. Y tendrás que descubrirlo por ti solito.Aquí estoy. Un abrazo.Me alegro mucho, os irá muy bien.
papi Eneko

Monday, April 27, 2009

Intenciones

Me voy a hacer un favor: voy a dejar de mortificarme. Voy a vivir la experiencia y punto. Si alguno de los dos me deja, ni modo y ya.
No puedo vivir ya con tanta angustia en mi cuerpo. Voy a asumir que cualquier cosa puede pasar. Que yo siempre amo más y siento más que los demás. Voy a asumir que este exceso de sentimentalidad, ni si quiera es genuino, es un subproducto de un desbalance químico en mi cerebro. Entonces, voy a gozar mis espejismos, tan reales como lo son para mí.
Me voy a dejar llevar asumiendo tal cual es que yo siempre voy a necesitar más, hostigar más y querer más que las otras personas. Siendo así, puedo tener la tranquilidad de que aunque tenga miedo, es natural que lo tenga.
La angustia que siento es por querer combatir ese miedo tratando de buscar seguridad y confianza en el otro. Por intentar no decir, no acaparara, no saturara. Y como quiera ni logro no ser yo, ni logro tener calma. No está resultando para mi emotividad. No puedo estar dependiendo de buscar "pruebas" de amor a cada minuto. No puedo estarme ofuscando por "qué van a pensar de mí si..." "qué van a decir de ..." Yo no soy una persona nueva en la vida de nadie. De hecho, por eso no me gustan las personas nuevas. Yo sí soy acosadora y sí soy abusadora.
Me voy a hacer un favor todavía más grande: voy a tomar la actitud que debí tomar desde un principio. Quien me quiera que me aguante. Y ya queda. Y si no me aguantan, pues se acaba, y si se acaba, pues ni modo, porque lo bailado, ni quién me lo quite.
Así que, adiós a los miedos, adiós a las angustias y bienvenida mi bipolaridad.

Sunday, April 26, 2009

Mucho miedo

Me cuesta aceptar lo que me pasa. Me cuesta darme cuenta. Y justo cuando empiezo a sentir que hago las paces con la situación, me topo de nuevo con que no soy tan fuerte, tan lista, tan hábil... ni tan fría. No tengo la inteligencia emocional para deslindar mis emociones de una situación a la que no corresponden.
Y es bien difícil explicar como algo que me pone tan feliz, me pone tan triste.
Por momentos, soy tan feliz que no lo creo. Mi alegría sobrepasa las fronteras de mi piel, me desborda. Siento líquido rosa y viscozo que emana de mis poros como dulce pegajosos de cereza. Vivo en un algodón de azúcar. Mi sonrisa le hace competencia al sol primaveral de abril. Ilumino todo a mi paso. La gente se me queda viendo. Habito una ilusión que he creado para mi y a ratitos la comparto.
"De color de rosa veo la vida hermosa."
En este nuevo mundo que habito, yo no soy yo, soy otra. Una que se da permiso a ser la más feliz, sin recato, ni tapujos, solo feliz. En mano ahora hay un bulto que es un nuevo miembro de mi cuerpo, como un anexo a la extremidad superior derecha: el celular. Cada vibración acelera mi respiración y desacompasa mi palpitar. Voy todo el día sonriendo, contenta. No es como si lo fuera, es que ya lo soy, soy la más feliz.
Por momentos luego, lo mismo que me eleva, me deja por el suelo. Siento angustia y depresión todo el tiempo. Miedo al miemdo. Miedo a dejarme de sentir bien. Miedo a sólo ser yo la que lo sienta. Miedo a esto, a lo otro, a aquello. Y justo en el momento en que siento que ya lo tengo dominado, y que puedo dejar de sentir miedo y que todo va a estar bien, sucede alguna otra cosa y vuelvo a sentir miedo.
Ya no sé qué más decir.
Sé que necesito gritar muchas cosas. sé que necesito desahogarme, ventilarme y dejar la energía fluir. Pero tengo miedo de volverme repetitiva. De pisarme la cola. De darle vueltas a lo mismo y solo volverme aburrida.
Miro el celular y el reloj tantas veces al día que me siento tonta. Juro que quiero tirarlo y dejar de depender de ese aparato. Ya no quiero estar esperando un recadito. Tengo ganas genuinas desde el fondo de mi alma, de dejar de desearlo. Siento prisa y ansiedad todo el día por estar en otra parte. Si sé que un día no lo voy a ver quiero que sea ya el día siguiente, o el siguiente o el siguiente. Mi cuerpo parece no poder estarse quieto. Mis piernas se mueven por sí solas. Prefiero estar parada que sentada. Caminando que parada. Es como si tuviera una energía tremenda acumulada en mi cuerpo. Pienso en sexo todo el día. Definitivamente, esto no es decente.
Tengo angustia generalizada. Mi cuerpo y mi psique no están preparados para sentir así, vivir así, querer así. Parece que no puedo dejar de decirlo: me sobrepasa, me desborda, explota mis límites. estoy muy sensible, parece que lloro todo el tiempo. Una persona "inteligente" podría pensar que esto no mehace feliz porque sufro todo el tiempo, pero no. Extrañamente, me exita, me apasiona, me siento feliz y soñadora hasta en clase de biología.
Estoy muy sensible. De verdad que sí lloro todo el tiempo. Me embargan emociones nuevas y viejas. Se revuelven. A veces siento tanto miedo que me paralizo. Amo a dos bandos. Extraño a dos bandos. Me siento doblemente querida. Doblemente abandonada. Doblemente vulnerable. Doblemente necesitada. Ahora soy más suceptible que antes al dolor y me da mucho miedo.
Sé que el miedo se va a ir pasando. Poco a poco. Cuando me acostumbre a sentir tanto. Cuando sienta más confianza. Cuando asimile las cosas, mis circunstancias y mi lugar.
Oigo música y todo me recuerda a algo. Soy una enamorada del amor. Adicta a la sensación. Adicta a ser apreciada, querida, amada. Adicta a escuchar linduras, cursilerías, sentir caricias. Adicta a la admiración y aceptación externa. Adicta a los besos. Adicta al sexo.
Y tal cual los adictos, tomo riegos y tomo desiciones erráticas. No me voy cuando debo. Extiendo mis estancias. Estiro los límites. Y regersa el miedo, El miedo al desgaste, a que se reviente.
No quiero parar. No quiero dejar de sentir, aunque sea tanto que me agobie. Quiero gritar y gritar y gritar todo el tiempo. No puedo permanecer contenida con tanto dentro de mi.
Monterrey, N.L., México entre el 21 y 25 de abril de 2009.

Wednesday, April 22, 2009

Muda

A penas le veo, quedo muda. Se me olvidan las palabras. Se me olvida mi nombre. Me siento tiesa. Como si tuviera que salir huyendo de mi cuerpo. Y entonces para disimular mi carencia de sentido hago uso de palabras superfluas. Hablo y hablo y hablo, pero de cualquier cosa ajena a mí. Me desconecto de mí. Intento no sentir, porque me ebulle la piel al punto que duele.
¡Ardor! Es ardor. No tengo otra forma de definirlo. Es un ardor en las mejillas, en la lengua, en el vientre, en la vulva, en la sangre. Me escuece el cuerpo.
Ardo en deseos, en ganas, solo de imaginar su presencia. Cierro mis ojos, veo su rostro plasmado en mi memoria y siento palpitar mis sienes, oigo mis latidos, me corre la sangre ardiendo por las venas. La electricidad asciende mi cuerpo desde la base de mi espalada hasta sentir que estalla mi cabeza. Siento una intensidad acuciante en toda la piel, que me eriza; me sofoca; me sublima.
Me imagino como tigresa brincando sobre su presa. Me deseo tocándole, besándole.
Y luego, abro los ojos, le veo, y no sé qué decir. Quedo muda. Se me olvidan las palabras. Se me olvida mi nombre y huyo de mi misma hablando de nada, fingiendo autocontrol, pero es miedo. Hablo y hablo y hablo de cualquier cosa ajena a mí.

Tuesday, April 21, 2009

Me quiere, no me quiere... ¡Me quiere!

Me siento como deshojando margaritas, preguntándome a cada paso si me quiere o no me quiere. ¡Qué boba! Y finalmente lo hice. Busqué la compatibilidad entre Piscis y Escorpio. Y también cómo seducir a un Piscis. Y me sentí tan estúpida. Tan falta de creatividad queriendo seguir un formulario.
Estoy como idiotizada.
Tras mi manifiesto de idolatría semi absoluta, empezaron a fluir los mensajes al móvil.
Mensaje 25:
Preciosa, ya lo leí. Y ahora tengo aún más ganas de verte. eres mucho más
que la novedad, entre más nos vemos más quiero verte. Me dejas verte
entonces?
De: Eduardo cel
03:55 pm 18-ABR-09

¿Preciosa yo? ¿Neta? Me derretí. Me tuvo allí, lo demás es un texto bello. Lo hubiera dejado que me viera cuando fuera, donde fuera, como fuera. Pero soy una guerrera. Después de todo, no fui yo la que movió los planes para otro día.
El viernes, por la mañana, me conecté al messenger. Ya venía yo en bajón por no haberlo visto a solas. Pero habíamos quedado de vernos el viernes por la noche, para salir solas las tres, o sea, Michelle, Meztli y yo. Pero en el messenger, me dijeron que recién el jueves por la noche, Meztli les dijo que lla no podía y lo dejáramos para el sábado. Al principio, lo tomé bien, pero, ¿por qué debían cancelarme a mi también?
Para la tarde, el bajón fue inmenso y el sábado no hubo forma de pilotear y me estrellé. Le escribí ese mail. Era obvio que el matrimonio feliz tenía planes el sábado a media tarde y no me podían "acomodar" hasta más tarde en su apretada agenda. Pero yo no soy un mueble que se cambia de lugar según el antojo. Así que, hice mis planes y los compliqué un poco a ellos también.
Mensaje 26:
Qué parte?? Ya lo leí y así me siento. Entonces, vienes, voy por ti?
De: Eduardo cel
04:04pm 18-ABR-09
Yo moría por verlo, sin embargo, ya había quedado con mi madre de ir al súper.
Mensaje 27:
Te amo :*
De: Eduardo cel 05:16 pm
18-ABR-09

Sentí que se me salía el corazón. Se me doblaron las piernas, casi me caigo. Si no fuera porque iba en el coche con mi madre. Pero me quedé muda por más de diez minutos.
Mensaje 28:
No sé por qué no quisite venir desde ya, pero aquí te espero a la hora que
quieras, con o sin ropa nueva.
De: Eduardo cel 05:17
pm 18-ABR-09

¿Qué por qué no quise ir? ¿A poco no es un cínico? Porque en toda la semana no tuvo ni un ratito a solas para mí. Porque sus citas las hace en tándem. ¡Porque necesito sentir que yo también tomo decisiones sobre cómo, cuándo y dónde nos vemos!
Pero, obviamente, no contesté nada. ¿Qué se contesta en esos casos? ¿Qué pude haber dicho que no le hubiera dicho antes en el mail? ¡Que me da miedo! ¡Qué siento terror de estar siempre disponible! ¡Qué tiemblo ante la idea de no hacerme esperar! ¡Qué sufro de pensar que se va a aburrir de mi porque siempre estoy ahí! Y luego yo, no puedo ni atreverme a pedir la misma disponibilidad.
Mensaje 29:
Odio cuando no sé si no me contestas o solamente aún no te llegan mis
mensajitos por el delay entre operadores.
De Eduardo cel 05:26
pm 18-ABR-09
¡Wow! Odio y amor en dos mensajes casi consecutivos. Hablamos de emociones intensas. Pero niño, ¿de verdad eres capaz de sentir con esa intensidad? Lo que pasa es que me asusta. Espera, ¿fue mi imaginación o leí que me ama?

Mensaje 30:
Ja ja ja de qué parte (te asustas)? Yo ya sé como te sientes mucho antes de
que lo escribieras. Yo sencillamente me di la libertad de amrte desde el
principio. Y
De: Eduardo cel 05:46 pm
18-ABR-09


Mensaje 31:
creo que tenemos la llave de la felicidad aquí con nosotros no? No me
asusta ni quererte ni que me quieras.
De: Eduardo cel 06:02 pm
18-ABR-09

A las 8 pm Meztli ya estaba con ellos y yo todavía no llegaba a mi casa. Llegué al cuarto para las nueve. Y salí de casa a las diez y cuarto, rumbo a una fiesta sin ellos. Claro, ya iba yo de mejor ánimo con todos los mensajes.
Los mensajes continuaron hasta las 11:30 pm, hora en que se apareció Eduardo a robarme de la fiesta en que yo estaba. No quiero ni pensar lo que habrán imaginado mis amigas. Está por demás aclarar que yo lo hubiera seguido al fin del mundo en ese instante.
No sé quién seduce a quién en este momento. No sé ni cómo funciono yo misma.

Saturday, April 18, 2009

Certezas

Hola!
Ay qué patética yo, creo la oralidad de plano no se me da ;P
Me traganto toda y me da una enorme vergüenza de oírme y que me oigan la sarta de barbaridades que puedo decir...

En fin, mejor te lo escribo, no? Así es tan fácil como darle delete y ya nadie se acuerda de lo dicho.
Me siento en el extremo de una pasión. Me siento, me reconozco molesta. Enojada. A punto de una explosión masiva irrevrente. Uno de esos terribles ataques de sinceridad que aniquilan a terceros. Y que estoy segura que te austan.
Ayer por latarde estaba yo muy contenta en mi trabajo, como cada día los últimos días. Y de pronto me inavdió una curiosidad. ¿Por qué quieres esto? ¿Cómo para qué? Y entonces algo como una certeza se me acomodó en la cavidad torácica, ja ja ja, por alguna extraña razón llevo dos semanas con dolor de esternón. Jamás me imaginé que algo tan antipoético fuera signo de alteración emocional. Y esa certeza se me empezó a encajar contra las costillas. Y me terminó por doler. Me cayó de golpe y como sorpresa no querida, darme cuenta de que no sé lo que quieres. Y que ultimadamente no me hace diferencia saber lo que quieras o desees. Porque las cosas son lo que son: un juego.
Un juego, que yo adulta responsable decidí jugar y que yo dije que yo sola me iba a hacer cargo de mis sentimientos. Y que yo sola debo hacerme cargo de ellos. Yo y no Cassandra, yo y no tu, yo y no nadie. Pero a mí mis sentimientos me omnubilan, me sobrepasan y me destrozan. Porque mis sentimientos nunca deciden hacerme caso a sentir sólo lo que deben y mi cabeza parece que no puede refrenarlos.
Y viene la parte esa en que yo soy codependiente, ja ja ja. Y soy "high maintenance" y soy posesiva y todas esas linduras con las que me califican las personas que suelen agobiarse de mí. Empezando por mí que soy la que más me agobio de mí misma.
Y termino aborreciéndome por payasa, me caigo tan mal. Me veo a mí misma desde afuera, y me digo "ay ya, no seas patética, será para menos." Pero algo en mi corazón sigue doliendo.
Y mi cabeza fría dice: "síguele, no pasa nada, igual y nadie lo va a notar". Y mi corazón más cálido dice: "pero yo quiero que lo note, necesito que lo note."
¿Ves como soy rollera? Pienso que te digo mucho y en realidad no digo nada. Por eso no puedo hablarlo, porque para cuando llegué al meollo del asunto ya se acabó el saldo o la batería, ja ja ja.
Pero al final, yo soy hedonista y me gusta mucho sentir intensamente para bien y para mal. Yo quería que esto pasara, lo que no ubico es por qué lo dejas pasar.
Y me miro, y me doy cuenta, que soy solo yo, con mi imaginación desbordada. Porque soy yo la que pasa horas en messenger, y soy yo la que manda notitas, y soy yo la que... blah, blah, blah... Sí, de hecho es eso, soy yo la que habla y se crea una historia. Lo cuál me confirma que nada es real, sino un bonito capítulo para mi autobiografía, ja ja ja
Por eso te digo que estoy enojada conmigo, y no con nadie. Y que literalmente aplica el "no eres tu, soy yo."
No tienes idea de qué humillantemente desnuda me sentí al leer "cuando se te pase la novedad" y peor que sé que es cierto. Esto es solo una novedad. Un ratito. Y tenerlo tan claro me molesta y me hace enojar más conmigo. Porque una no puede enojarse con el marido de otra que es nada más un entretenimiento de un rato, ¿verdad?
Y ayer sentí, al invadirme la certeza de que soy yo la que juego sola un juego muy peligroso, que lo que más me molestó fue pensar en cuando a tí se te acabe la novedad. Y como no podría yo con eso, mis impulsos de kamikazee me dicen que mejor antes que después y aquí no pasó nada. Porque y volvemos a sentimientos humillantes por obvios, ni modo que te pida que huyamos juntos, no? Ja ja ja Qué ridícula! Pues obvio lo tengo claro. Soy un producto de novedad que puede ser divertida un par de semanas, pero que luego cada cuál tiene que volver a la realidad.
Y mi realidad es tan aburrida. No tengo suficiente extrañando a una, ahora extraño a dos. Qué desesperación. Qué angustia. Qué sinvivir. Necesito tres pesos para comprarme una vida! Mejor 1000 para que sea de lujo!
Al final, puede ser también que yo soy una controladora y me gusta tener todas mis emociones y sentimientos en orden. Y me gusta tener el control de cada situación en mi vida. Pero contigo, por alguna extraña razón que certifico NUNCA había vivido antes, me escurrí (literalmente!) de mí misma. Ya ni para qué te digo estas cosas, verdad? Pero alguien tiene que saberlas, y mejor que seas tu, que eres el afectado. Cada vez que me he dado permiso de "enamorarme" ha sido como experimentos controlados, sobre los que yo decido cuánto y hasta dónde. Y si empiezo a sentir que me rebasa me hecho en reversa a tiempo, para no salir herida. Pero contigo, este no era el plan. Digo, cuál amor, si sólo hay sexo! Y de pronto, no sé qué fue. Y quiero saber qué fue! Exijo saber qué fue! Ni si quiera tenemos un sistema de creencias similares! Si te digo que fueron las estrellas o la irrefrenable compatibilidad Piscis-Escorpión te vas a reir de mí! Y dudo que creas en las almas. jajaja Ves como si soy patética!
Por eso estoy enojada. Porque no quiero quererte.
Día a día, gota a gota, la tensión dentro de mí aumenta. Ahora he descubierto que no sólo soy catalizador de sentimientos, sino quizá única actriz de todo este "intercambio" emocional en el que nada cambia en realidad, salvo fluidos y ciclos circadianos.
Sigo esperanzada en un mail, un mensaje, una llamada. Y no hay ningún indicador de que vaya a recibir uno.
Estoy tan molesta de darme cuenta de que la única con expectativas e ilusiones soy yo. No debo tener expectativas. No puedo tenerlas, de verdad no es correcto.
No me gusta sentirme "amante", la "otra." Ese no es mi papel. Yo he sido siempre la primera, la única, la más importante. La especial.
Tengo un dolor muy grande en el pecho. Mi corazón se rompió ayer en la tarde al darme cuenta de que no debería tenerlas, pero sí tengo expectativas.
No debo quererte, no puedo amarte, no, no, no. No debo tener expectaivas.
Y bueno, tras este ataque de sinceridad masiva, creo que ya estoy lista para verlos en la noche, con mi cara de siempre, con sonrisa de edecán de salchichonería, con amabilidad, pero tan impenetrable como me gusta ser. Obvio, lo que te corresponde a tí es dar delete a este mail. No compartirlo con nadie y no pensar mucho en él. Que mis sentimientos son míos y me toca a mí ver qué hago.
No te preocupes por contestar, ya sé que con un par de palabras después me tendrás contenta otra vez. Quizá no lo sabes, pero tienes mucho tiempo haciéndolo.
Te cuidas. Nos vemos, si me hablan, porque eso sí, dignidad ante todo, yo no te voy a hablar, ja ja ja
Besos
Atte.
Polyanna

Wednesday, April 15, 2009

Michelle

Ella es linda. Es un dulce. Es muy suave. Su piel es como cliché de novela erótica, dulce, blanca, tersa, suave, elástica, lozana, exuda juventud en cada poro. Parece colegiala. Sus pies pequeños, exquisitos. Sus piernas delgadas y bien formadas, con muslos que invitan. Nalgas redondas, con una ligera caida seductora y un movimiento acompasado al andar. Nalgas ricas que se antoja lamer, morder besar. De esas que parecen un corazón invertido que una simplemente quiere poseer y poseer. Su vientres ahora, tras sus dos hijos, deja ver la marca de su maternidad y lejos de entorpecer al amor lo exalta. Esa pequeña pancita que asoma se antoja juguetona. Su ombligo pequeño y redondo invita a perderse dentro de él. Sus pezones rosas, literalmente rosas se disparan al mundo y gritan cómeme, muérdeme, pero sé gentil. Quisiera sumergirme en ellos y entre ellos. Dejar correr el tiempo, ver su rostro desde su pecho y sostener un seno en cada mano mientras miro su sonrisa. Sus hombros son como un dibujo de línea definida y los huesos de su cuello se asoman ligeros, pero firmes. Es linda, como una margarita, como un jazmín o una violeta, esas flores sutiles, perfumadas, aniñadas, que denotan inocencia y sencillez. Parece una acuarela del siglo XIX, ligeramente desteñida por el tiempo, pero de esas en que se adivina el fulgor de antaño.
Su cabello lacio, su boca y dientes grandes, es como una hippie bohemia, perdida de tiempos inmemoriales en una época fuera de contexto. Reacomodada mañosamente sobre un edredón blanco, nórdico de plumas de ganso, que denota apenas un poco de lujos contemporáneos, sofisticación inesperada y entonces cae la duda sobre la anticipada y supuesta sencillez.


Pero ese jugueteo de su fondo y su figura resulta erótica. Se antoja una flor de muchas capas. Un juego de velos. Un juego de azar. ¿Será la que parece a simple vista? ¡No, qué va! Definitivamente no lo es, esa aura de inocencia es pura artilleria pesada, es un veneno que invita para que el bicho caiga.


Y el bicho soy yo. Me ha atrapado. Yo yacía sobre su cama. Insegura de cómo proceder. ¿A quién debía tocar primero? ¿Cómo? Sin decir nada llegó por mi espalda (¡Michelle!) y recorrió sus manos por mis hombros (¡Michelle!), bajó por mi pecho hasta tocar mis pezones erizados en punta (¡Ah, Michelle!). Rozó sus labios tras mi orejas y con su mejilla acarició la mía (¡Michelle!). Me plantó un beso, abrió mis piernas y dejó que su marido deslizara sus dedos dentro de mí (¿estabas allí?). Estiré mis brazos tras mi espalda tratando de contestar sus caricias, dejé mis dedos enredarse en sus finos cabellos color caoba, mientras su aroma me embriagaba. Cerré mis ojos y me dejé llevar.


Michelle, me ha atrapado. No puedo dejar de pensar en ella. Pasaron dos días. Eduardo dice que ella tiene muchas cosas por digerir. Que todo la ha tomado por sorpresa. Que no sabe cómo sentirse respecto a esto que nos pasa. Y mientras, me he imaginado saliendo sola con ella y con Meztli. Ideando maneras para encontrarnos a solas. Finalmente, mañana será el día que volveremos a encontrarnos. Iremos con nuestros hijos, a algún lugar público de esos donde las mamás pasean con sus niños, y nadie podrá imaginar los juegos eróticos de estas dos amigas en la cama.


No sé qué me exita más si salir con una mujer casada... ¡o con su marido!


No aguanto un día más, ¡mi cuerpo pide más!

Tuesday, April 14, 2009

Enculada o descerebrada?

Me detuve justo a tiempo. O quizá no tan a tiempo. Frente a mí en la pantalla del ordenador puedo leer las palabras de mi última búsqueda "cómo seducir a piscis?" En qué momento una mujer, básicamente fría, calculadora, intelectual y pensante se convierte en esta gelatina sin cerebro que sólo espera junto al móvil un msn que diga ":*"
El domingo lo pasé mal. Sola en casa, sintiendo escozor en todo el cuerpo. Los niños anduvieron particularmente chillones. Todo parecía provocarlos. Esperé y esperé y nunca apareció Eduardo por el messenger. Por la noche para curar mis ansias me puse a investigar más sobre el poliamor y terminé enviándoles a los 4 un artículo sobre "Derechos de la relación secundaria" y "Como tener feliz a tus parejas secundarias".
El lunes, por la mañana finalmente lo vi en messenger. No sé qué tropel de locuras salieron de mis dedos. Bueno, sí sé. El pobre hombre terminó diciendo: "temo que me pidas que huyamos juntos". Y yo con la carita esa que pone una raya horizontal en la boca. Soy una idiota. Una vieja loca. Me informó que Michelle necesita tiempo para sentirse cómoda con la situación. Ella se siente saturada con tantas emociones nuevas. Tiene miedo. La sobrepasa. ¿Y quién piensa que para mí esto es un paseo? Pero esa masa gelatinosa en la que me he convertido parece dócil, complaciente y poco asertiva. Dije que sí a todo lo que pude. Quizá un poco pasivo-agresivamente le insinué que "tengo derecho de disfrutar plenamente de mi etapa de Enamoramiento de Nueva Relación" o una mamada así de las que leí en el artículo.
Pensé que todo volvería a la normalidad para mí una vez que entrara a trabajar. La verdad no fue así. Llegué al trabajo como flotando y sonreí más de lo que normalmente suelo hacerlo. Juraría que coquetié hasta con un jovencito gay. Por la noche al volver a casa nuevamente esperé y esperé y esperé verlo aparecer de nuevo. Pero evidentemente nunca apareció. Quiero hacerme la difícil y no estar disponible. En el mundo heterosexual se supone que eso funciona, no? No lo sé, no lo recuerdo. Me agobia.
Los hombres son de marte y las mujeres de venus. Somos dos especies distintas, ni si queira estamos planeados para vivir juntos. ¿Qué diantres quiero yo ahí? Estoy enojada conmigo misma ahora porque no estoy enamorada, estoy enculada. No ha sido más que un overshot de hormonas mal plan. Simplemente no es nada. Yo no puedo estar enamorada de un hombre. Ni si quiera los aguanto. No me gusta su formade ser, de pensar, de transmitir cariño ni de sentirse y creerse el centro del universo. Estoy a punto de convertirme en una de esas ridículas mujeres frustradas que terminan por llamarles caracoles babosos, sólo por despecho.
Y pienso que mis cualidades naturales y frecuentes pueden funcionar. Con las lesbianas nos funciona. Después de todo a la segunda cita siempre llevamos el camión de mudanzas, no? Así o más estereotipos? Estoy molesta. Una parte de mi dice, déjalo fluir, deja que tsu sentimientos fluyan de forma natural, si tienes ganas de escribirle escríbele, si tienes ganas de llamrle llámale y así.
Pero ya ves lo que pasa, y lo que dicen y lo que resulta, porque luego me asalta la duda, no se supone que "ellos" necesitan su espacio personal y que necesitan sentirse libres y poco invadidos. Y después de todo eso es lo atractivo de una nueva relación, la frescura, no la angustia de "tener que cumplir". ¡Qué agobio! No me gsuta. Definitivamente ya no quiero sentir esto. No quiero. Quiero pensar que después de dos días y medio de no evrle estoy entrando a la etapa de la desintoxicación de las drogas. Esa en la que una se pone cranky y duele mucho muchísimo el cuerpo. El amor es una droga. Qué ilusa. El sexo genera drogas en el cuerpo, es todo y el cerbro como el de lso bebés agradece en el imprinting al primero que mira cuando eso pasa. Como los elixires.
Ingenua yo, hasta le mandé una canción. Ahora me siento tan ridícula. Creo que me voy a esconder el resto de la semana. Es hora de moverse y saltar a la siguiente cama. No voy a poder con esto. Necesito recuperar mi frialdad y sobre todo, mi cerebro.

Sunday, April 12, 2009

No imaginé que dolería

Dcen que el amor libera. Por eso sé que siento pasión, porque lejos de sentirme liberada me siento sobrecogida y adolorida. Literalmente me duele el esternón y ya no sé cuántas veces lo he dicho en los últimos días. Siento que me falta el aire a cada paso. Una presión en el pecho como si no pudiera contener tantas emociones jutas y quisera explotar. ¿Es normal? Una ironía querer buscar normalidad cuando se lleva este estilo de vida.

El viernes a media mañana, fuimos a desayunar con nuestras familias tras la "orgía" como decidieron llamarle ellos. Meztli, Delfino, Michelle, Eduardo y yo, con mis hijos y sus hijos. En un momento preferí ponerme a cuidar a los niños en área de juegos. Me senté en una sillita y me perdí viendo hacia la nada. Me concentré en mis sentimentos. Me sentí sola. Llena de deseo, llena de sus besos y su caricias de la noche anterior, pero con ganas de un abrazo más. Sin embargo, allí, delante de la gente, en nuestra sociedad regia, entre personas que quizás podrían o no reconocernos, frente a nuestros hijos, no sería adecuado.

De pronto le sentí rozar mi espalda, de forma casual, casi disimulada. Sólo se acercó a decirme que la mesa estaba lista y que llevara a los niños. Una chispa de electricidad recorrió mi espalda. Cada pequeño contacto logra en mi tener ese efecto devastador. Me da vida y me la quita, con un solo contacto de sus dedos.

Estos días de Semana Santa han sido muy calurosos. Más, si además tomamos en cuenta el calor que me produce tanto tiempo a su lado.

Me gusta la sensación de intimidad que se ha ido desarrollando en los últimos días. Me da miedo, mucho. Quisiera dejar de sentir miedo. O más bien quisiera saber qué es lo que me da tanto miedo.
Anoche cuando me vino a dejar, Eduardo me dijo que me quería. Así simple, llano: Te quiero. Y yo voltié a verlo, levanté una ceja e hice una mueca de incredulidad. Me fui. Lo quiero tanto que no le creo. Yo sé que lo ha estado platicando con Michelle. Yo sé que ella está haciendo un esfuerzo por entenderlo. Y sé que está investigando hasta en wikipedia sobre el poliamor. Pero me da miedo mi propia intensidad. Creo que no tienen idea de mi intensidad. Me da miedo perderme. O quizás me da más miedo que me encuentren y entonces sí perder algo más importante. No lo sé.


Enamorada otra vez.

Me enamoré. No quería, no lo esperaba y me enamoré.
El amor, dicen, es maravilloso, y se debe aceptar con los brazos abiertos. Así lo recibo yo. Cada vez, siempre.
Pero me tomó por sorpresa. Y me siento extrañada y fuera de mí. No me concibo enamorada de él.
Se suponía que yo iba a darle un toque divertido al matrimonio de Michelle y Eduardo, sólo eso. Ahora me descubro a mi misma pensando cada mañana en él. Ayer me sentía sofocada, me faltaba el aire. Hoy me siento como gata complacida.
Yo tengo una pareja. Una mujer hermosa con la que llevo una vida incomparablemente bella. La idea de jugar con Eduardo y Michelle sólo era una calentura primaveral. Responder al deseo externado por él.
Hace más de cinco años, poco antes de que Casandra y yo comenzáramos a vivir juntas en esta Ciudad de Montañas, Eduardo y Michelle me pidieron de favor acompañarlos a un motel para cumplir la fantasía de ella. En ese momento yo accedí por postura política y por sentirme independiente. Para demostrarme a mí misma que ser pareja de Casandra no reprimiría mi vida.
En aquella ocasión, sólo me enfoqué en Michelle. Exploré su cuerpo, mojé mis dedos en ella y me sentí la más sexy de todas las mujeres mientras su aún prometido nos miraba con cautela, pero sin participar. Repetimos una segunda visita.
Luego, Casandra se vino a vivir conmigo y me convertí en monógama por poco más de cinco años. A los pocos meses de aquella primera vez, Eduardo y Michelle se casaron, y por un malentendido dejamos de hablarnos por casi 2 años. Ellos se casaron y en teoría yo estaba invitada a su boda, pero como nunca recibí la invitación, me presenté al evento al día siguiente, lo cual me hizo sentir profundamente dolida, humillada y usada.
Hace poco, Casandra ha tenido que salir de la ciudad. Seguimos siendo pareja, pero de lejos. Todo este tiempo juntas nos hemos dedicado a movimientos lésbicos, feministas y de disidencia sexual. Yo he sido lesbiana por filiación política. Me siento lesbiana, me se lesbiana, me defino lesbiana, me quiero lesbiana.
Apenas en febrero, Eduardo me mandó un mensajito al móvil:
Mensaje 10:
Oye sin ofender, el fin de semana vimos las fotos que tomamos
los tres en 2003, te acuerdas cuáles? Habría que repetir un día
De: Eduardo cel 04:42 pm 23-FEB-09
Por su puesto, yo contesté que soy una santa y que ya no hacía esas cosas. Dentro de mí sentí hervir mi sangre. Pensé en Michelle, en su piel blanca, su cuerpo delgado, sus pechos redondeados, sus nalgas firmes y todo dentro de mí gritó sí. El cumpleaños de Eduardo se acercaba y yo pensaba en cómo darles el sí sin verme desesperada. Finalmente, el 1ero de marzo llegó y en una reunión de amigos para celebrar su cumpleaños le dejé entrever que sí, pero que después del 18 de marzo que Casandra venía de visita.
Llegó ella y se fue. Y me sentí presionada pensando que ahora debería de cumplir. Me quise hacer tonta como si no hubiera recordado y estuve a punto de hacerlo. Se me atravesó mi periodo y por obvias razones pedí una prórroga antes de cumplir. Mientras tanto, Eduardo insistía. Y yo empezé a sentir "rarito". Me sentí deseada. Como hace mucho que no me sentía.
Empezamos un extraño jugueteo a través de la red y por medio de mensajitos de móvil. Un día, no sé qué se me subió a la cabeza y simplemente me masturbé pensando en ellos y les mandé todo lo que iba haciendo por mensajes. Al día siguiente fuimos a cenar los tres. Con nuestros hijos. Michelle se sintió muy cansada, abrumada y la noche terminó temprano. Después de eso yo ya no quería seguir, pero Eduardo volvió a insistir. Fue muy elocuente y también ella me buscó. Michelle me pidió que le diera otra oportunidad y seguimos jugueteando por messenger.
La noche siguiente, nuevamente yo ya no podía más con tanto deseo acumulado dentro de mí. Pero algo empezó a cambiar, de pronto me dí cuenta que estaba yo deseando estar con él. Sentirlo dentro de mí, tocándome, cogiéndome, saboreándome. Le envié fotos mías, tocándome, pensando en el. Algo súper atrevido que yo nunca había hecho.
No sé cómo surgió, a quién se le ocurrió, le dije que no aguantaba yo ni un minuto más de espera y quedamos de vernos al día siguiente. Pasó por mí a un lugar del centro, corrimos auna farmacia y de allí a un motel. De camino allá le recordé que llevaba yo 5 años de no estar con un hombre, le pedí que fuera gentil y que me viera como casi virgen.
En cuánto llegamos me hizo suya. Y fue literal. Fue arrebatador. Me sobrepasó. Sentí tanto, tanto, tanto. De una forma que pensé que ya no iba a sentir nunca en mi vida. Se me fue la respiración.
La noche siguiente, nos encontramos de nuevo, pero esta vez con Michelle, su esposa. Empezamos de forma sutil. Delicada. Con juegos eroticones con dados y tocamientos. Quitándonos prendas cada media hora hasta quedar completamente desnudos. Yo casi no me atreví a tocar a Michelle. A ella le excita que yo toque a Eduardo. Le excita ver cómo lo desean. Y yo lo deseo. Quizá demasiado. Esa noche me di cuenta con tristeza que no es igual estando ella. Porque hay más sentimientos y emociones qué cuidar.
Pero yo he tenido que hacer un compromiso conmigo misma, de mis sentimientos me ocupo yo, que afinal de cuentas soy adulta y debo darme cuenta de la sietuación en la que estoy. No puedo llegar y decir: "Michelle, préstame a tu marido para que me abrace como si me quisiera", porque esto a final de cuentas para ella se supone que sólo trata de sexo, aunque para mí trate de algo más.
A veces, siento que no puedo controlarme, quisiera besarlo todo el tiempo, aún delante de mis hijos y nuestros amigos que en teoría no saben nada.
Era obvio que en 5 años yo no iba a ser la única en sus vidas. Ellos tenían ya otra amiga nuestra involucrada junto con su prometido en su relación. Eduardo y Michelle llamaban a este arreglo "swingers", pero descubrí que en realidad era más cercano a la polifidelidad ya que solo se intercambian entre ellos 4, y es definitivo que Meztli está tan enamorada de Eduardo como la que más. La puedo entender. Con su encanto de niño tierno es fácil perder la cabeza.
A Meztli no la hizo feliz saber que yo quería participar en su arreglo. Pero Delfino, su prometido se emocionó con la idea. Entre Eduardo yDelfino la convencieron de dejarme participar en una reunión grupal.
La interacción fue muy fuerte. Me pareció muy cruda en realidad. Todo fue como quitarse la ropa y buscar genitalidad en un par de minutos. Me sentí cohibida. No hay amor cuando se hacen así las cosas y yo ante todo soy una enamorada perdida. Me gusta sentirme deseada, pero también amada. Meztli me permitió tocarla, besarla y hasta probarla, pero su cuerpo no me dice nada, y el mío ni si quiera se sintió atendido. Por otra parte Michelle, fue más emotiva, y me dejó abrazarla. Michelle me gusta, pero me siento mal de saber que yo deseo más que sexo y orgasmos de su marido.
A mi todo me avergüenza. Me corta que me vean la cara cuando me vengo, me asustan las luces encendidas, tengo una lista de no's casi inquebrantable. Y sin embargo con Eduardo soy otra. Me siento libre de entregarme sin remordimientos. Me ha resultado sorprendente ver la química sexual existente entre nosotros. Y una parte de mí, la meramente intelectual sabe que no es otra cosa que un subidón de endorfinas que me tienen la visión nublada. Y eso me da más vergüenza, porque no soy yo la que lo siente, es mi cuerpo que está en un rush químico enceguecedor.
¿Cómo se define el amor? No lo sé, sólo se que estoy otra vez enamorada. Y puesto que amo a mi mujer, esto debe ser polyamor. En la práctica, en la vida real. Me da miedo. Y como vulgarmente se dice, me austa, pero me gusta.